Con el Málaga CF encarando la última jornada de LaLiga Hypermotion son muchos los malaguistas que esperan un giro o un punto de inflexión en la entidad de Martiricos para que la próxima temporada se pueda vivir una normalidad administrativa y deportiva que aporte tranquilidad y el club pueda seguir creciendo para devolver al cuadro de la capital de la Costa del Sol a donde corresponde acorde a su masa social y a la Ciudad de Málaga, la primera división.
Tras más de cinco años de administración judicial han sido mucho los rumores y las noticias que adelantaban un posible cambio de dueño para el Málaga CF, pero la realidad es que en la actualidad el mapa accionarial está conformado por la A.P.A. -Asociación de Pequeños Accionistas del Málaga-, la hotelera española BlueBay y Abdullah Bin Nasser Al-Thani, máximo accionista del club blanquiazul.
RedBird Capital Partners mostró interés y llegó a convertirse en parte del accionariado al adquirir un pequeño paquete de acciones de la mano de tres miembros de la A.P.A., pero viendo la imposibilidad de compra decidieron desistir y revender sus títulos. Además, también Qatar Sports Investments mostró interés en la propiedad de la entidad de Martiricos. Los máximos accionistas del Paris Saint-Germain y propietarios de un 21% del Sporting Clube de Braga llegaron a manifestar su intención de poder adquirir acciones del Málaga dada la proyección de la entidad, la sede de Málaga para el Mundial 2030 y las posibilidades de crecimiento de cara al futuro. En cualquier caso, la respuesta del máximo accionista Abdullah Bin Nasser Al-Thani siempre ha sido la misma, no tiene intención de vender sus acciones, por lo que cualquier posibilidad de cambio de propiedad es inviable.
Ante esta situación, que viene ya de largo, nos encontramos con propuestas como la del que fuera administrador concursal del Málaga, Daniel Pastor, abogado, economista y empresario malagueño, que decidió fundar una nueva entidad deportiva bajo el nombre de Club Deportivo Málaga 1903, algo que no ha sido bien acogido por la hinchada malaguista. Se trata de una arriesgada apuesta, que según ha expresado Daniel Pastor en varias ocasiones, cuenta con el respaldo de importantes empresarios, políticos y aficionados, en definitiva, malaguistas que creen en otra vía para el crecimiento de un club alternativo que pueda convertirse en representante en la capital de la Costa del Sol. Tras pasar por la dirección de la Unión Deportiva Torre del Mar, Daniel Pastor emprendió un nuevo camino al hacerse con el control del club murciano La Unión Atlético, en espera de que pueda llevar a cabo un traslado de la entidad que milita en Segunda RFEF hasta Málaga. Un proyecto complicado, sobre todo en el plano sentimental, pues la afición del Málaga CF está muy volcada con sus jugadores y su club, al margen de que esperan con ansiedad el final de la administración judicial. En cualquier caso, la alternativa de Daniel Pastor sigue su curso como proyecto deportivo en crecimiento dando algún paso que ahora mismo puede levantar ampollas en el malaguismo, como es el haber iniciado la petición del registro de la marca ‘Club Deportivo Málaga’ sin ‘1903’ en la Oficina Española de Patentes y Marcas. Tras la negativa a deshacerse de sus acciones por parte del máximo accionista del Málaga CF, Abdullah Bin Nasser Al-Thani, han sido muchos los que han pensado en alternativas, más o menos factibles o viables, para intentar desatascar la situación actual de la entidad de Martiricos, todos con buena intención y demostrando amor por los colores, llegando incluso a abordar la posibilidad de comprar el club entre toda la masa social del Málaga. En cualquier caso, mientras Al-Thani no contemple la posibilidad de vender, todo queda en buenos deseos, pero sin llegar a ser en una solución que pueda llegar a convertirse en realidad. Málaga, el Málaga y la hinchada merecen una solución. Los malaguistas están demostrando tener memoria, compromiso y fe.